El 20 de marzo es el Día Internacional de la Felicidad.
Los humanos estamos “diseñados” para buscar la felicidad, y el objetivo final de cada individuo es encontrar la felicidad. Sin embargo, a menudo fallamos y cometemos errores cuando tratamos de ser felices. Podemos cambiar nuestros hábitos para hacer que nuestras mentes sean más positivas y saludables.
Una de las cosas que podemos hacer es sonreír, un hábito que trae muchos beneficios. Otra actitud que puede cambiar nuestra vida para mejor es ir paso a paso. Es positivo saber concentrarnos en una cosa y poner nuestra energía en ella, para luego pasar a la siguiente. No es recomendable ocuparse de todo a la vez o intentar hacerlo al mismo tiempo porque es agobiante y estresante.
Cuando se trata de salud mental, los expertos recomiendan hacer deporte y meditar, ya que son actividades que aportan muchos beneficios y te ayudan a ser más feliz.
Según un análisis publicado en la revista Journal of Happiness Studies a partir de 30 estudios, la felicidad prolonga la existencia de las personas sanas porque evita que caigamos enfermos.
Piensa un poco en esta afirmación: “Soy feliz porque mi felicidad no depende de alguien más, sino de mi”. ¿En qué-quién-dónde pones tú la felicidad? ¿Qué tienes que cambiar en tu vida para ser más feliz?
Jesús de Nazaret nos rompe los esquemas respecto a quiénes son felices. El texto de las Bienaventuranzas de Mt 5 invierte los valores a los que nosotros estamos acostumbrados. Te invitamos a escuchar este texto con las voces de Ain Karem. Aquí.
¡Vive y sé feliz!
Paula Muñoz, Mara Pablo, Alba Fuente eta Nora Martín, 1º Bach A