El 16 de noviembre se celebra el Día Internacional para la Tolerancia, una fecha instaurada por la ONU en 1995, para conmemorar la Declaración de Principios sobre la Tolerancia.
En este documento se dice que, la tolerancia no es indulgencia o indiferencia, sino el respeto a las creencias, cultura y opiniones de los otros, así como también es un Derecho Humano, por lo cual es inalienable y lo que demuestra es que las personas son naturalmente diversas y solo en el marco de la tolerancia podrán convivir.
¿Por qué celebrar un día para la tolerancia?
El mundo actualmente se encuentra en conflicto. Palabras como xenofobia, discriminación, homofobia, aparecen en los titulares de los periódicos a diario. La humanidad parece haberse vuelto más intolerante, rechazando al que es diferente, sin darse cuenta de que cada individuo en el mundo, es por definición, diferente.
Ser diferente no es malo, lo que es realmente malo, son los prejuicios que se crean alrededor de aquellas personas que realizan acciones que no conocemos o entendemos. Bien sea por creencias religiosas, culturales o de género.
El Día Internacional para la Tolerancia, es una fecha que busca desembarazarnos de esos prejuicios e intentar entender al otro.
¿Cómo celebrar este día? ¿en qué podemos comprometernos?
En principio, lo mejor es que a partir de este día seas más tolerante con aquellos que se encuentran a tu alrededor. También puedes asistir a un evento donde se celebre el acto de ser tolerantes con otras culturas y conocerlas. Por último, comparte mensajes de tolerancia por medio de las redes sociales, destruyendo conceptos como discriminación, bullying, xenofobia, homofobia y demás palabras que no deberían existir en el idioma, porque no tendrían razón de ser en el mundo. Aprovecha el hashtag #DíaInternacionalparalaTolerancia, para etiquetar todo lo que subas a Internet.
Como escuela cristiana que somos no podemos olvidar que Jesús de Nazaret, a lo largo de toda su vida, con sus palabras y con sus gestos, fue una persona que pasó haciendo el bien. Ser tolerante le hizo relacionarse con todos por igual, poner a la persona en el centro de todo, relacionarse con aquellos que estaban enfermos y eran rechazados por la sociedad, o con las mujeres o los niños que, en aquella época, estaban discriminados y eran los últimos. Su anuncio del Reino de Dios, su anuncio con palabras y acciones de que otro mundo es posible, y que nadie puede quedarse atrás, es un grito a la tolerancia y al respeto. ¡El sí que fue un hombre sin prejuicios!
¿Por qué no dedicas un poco de tu tiempo a pensar en esta frase de Gandhi? «Puesto que yo soy imperfecto y necesito la tolerancia y la bondad de los demás, también he de tolerar los defectos del mundo hasta que pueda encontrar el secreto que me permita ponerles remedio».
(Lorea L.; Paula C.; Yhamilet F. y Carolina L, 1º Bach A)