La felicidad es una meta humana fundamental. Desde 2013, las Naciones Unidas han celebrado el Día Internacional de la Felicidad como reconocimiento del importante papel que desempeña la misma en el desarrollo de una vida saludable de las personas de todo el mundo.
Sin embargo, la felicidad hoy en día está seriamente amenazada, especialmente en estos tiempos de crisis a causa de guerras, pandemias y hambrunas.
En este día no podemos olvidar a tantos lugares donde ahora mismo la felicidad brilla por su ausencia: ponemos rostro y nombramos Turquía y Siria por el terremoto, Ucrania, por la guerra y los inmigrantes a los que el Mediterráneo se “traga”…
Podemos conseguir ser felices de infinitas maneras, y estas maneras son únicas en cada persona, por ello es importante saber identificar qué es lo que nos hace felices y priorizar esas cosas en nuestro día a día. Los pequeños detalles de cada día importan, ¡invierte en tu felicidad y en la de los demás. ¿Estás dispuesto/a?
Como clase nos comprometemos a tratar a los que nos rodean con compasión, amabilidad y empatía; también nos comprometemos a no juzgar a las personas si se muestran vulnerables y, por último, nos ofrecemos a ayudar a quien lo necesite cuando nos necesiten.
Como seguidores de Jesús de Nazaret, como escuela cristiana, no podemos dejar de leer en la Biblia, en muchos de los Salmos esa invitación a la felicidad y a la alegría: “que se alegren todos los que en ti confían Señor; que griten siempre de júbilo, porque tú los defiendes; que vivan felices los que aman tu nombre. Por ti me alegraré, oh Dios altísimo, y cantaré alabanzas a tu nombre” (Salmo 5). Y ¡cómo no! Ese mensaje continuo de Joaquina de Vedruna a las hermanas y hoy a todos nosotros/as: ¡Estad siempre alegres; os lo repito: estad alegres!
La felicidad no es pretender que todo suceda de modo que estés bien, sino que es llegar a estar bien independientemente de lo que suceda ahí fuera. Como decía Jean Paul Sastre: “Lo importante no es lo que te pasa, sino qué haces con eso que te pasa”.
Adrian J.; Claudia D.; Pablo J. e Ibai B., 1º Bach B